Amarrada por una atadura invisible que yo misma anudé
No supe darme cuenta de que no iba a recordar cómo desatarme
No me di cuenta de que era posible que no tuviese manera de deshacer los nudos
No me di cuenta de que vueltas y vueltas iban cada vez enrrollándose en mí, cada día un poco más, cada experiencia, cada día de soledad, cada relación, cada pensamiento... másy más...